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La Caja Estanca de 100×100 mm, un producto esencial en la sección de electricidad y canalización de Sodimac, es un elemento de seguridad crucial diseñado para proteger y organizar las conexiones, empalmes y derivaciones de las instalaciones eléctricas. Su característica principal, la estanqueidad, se refiere a su capacidad de sellado hermético, lo que la hace impermeable al polvo y al agua. Estas cajas son fundamentales para cumplir con las normativas de seguridad eléctrica, asegurando la fiabilidad y la durabilidad del sistema.
Las cajas estancas de 100×100 mm disponibles en Sodimac se ofrecen en diversos materiales y con distintas profundidades, como 60 mm o 70 mm, que influyen directamente en la protección que proporcionan. Los modelos de plástico están típicamente fabricados en ABS (Acrilonitrilo Butadieno Estireno) o termoplástico autoextinguible, lo que les confiere resistencia a altas temperaturas (hasta 650 °C), evitando la propagación del fuego en caso de un cortocircuito. Estos modelos, como la versión sobrepuesta, suelen contar con conos o pasacables flexibles que se adaptan a tuberías de diversos diámetros (10 mm a 25 mm), manteniendo el grado de protección IP.
El grado de protección IP (Ingress Protection) es un factor determinante al elegir una caja estanca en Sodimac. Las cajas estancas más comunes en este formato pueden tener un grado IP54 o IP55, indicando una protección robusta contra el polvo y chorros de agua, lo que las hace aptas para instalaciones tanto en interiores húmedos como en exteriores a la intemperie. Los modelos de mayor protección, como el IP65 (completamente estancos al polvo y protegidos contra chorros de agua potentes), son ideales para ambientes más agresivos. Además, el sistema de cierre, que puede ser a presión o mediante tornillos, asegura que solo personal autorizado pueda acceder a las conexiones internas, dificultando la manipulación por terceros y mejorando la seguridad.
En resumen, la Caja Estanca de 100×100 mm de Sodimac es una solución de canalización versátil y segura, imprescindible para proteger los empalmes eléctricos de agentes externos. La tienda ofrece opciones que varían en material (plástico ABS, metal), profundidad, y sobre todo, en su grado de protección IP, permitiendo al instalador seleccionar el producto que mejor se adapte a las condiciones ambientales y normativas específicas de su proyecto, ya sea en un entorno residencial, comercial o industrial.