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Contenido Editorial

Para qué sirve un controlador eléctrico de presión de agua

Los controladores eléctricos de presión de agua son dispositivos esenciales en sistemas hidráulicos modernos, diseñados para regular y mantener la presión del agua de forma automática y eficiente. Su uso se ha extendido en diversas aplicaciones, desde edificios residenciales y comerciales hasta instalaciones industriales y agrícolas.
También conocidos como press-controls o controladores de presión electrónicos, son dispositivos que se instalan en la tubería de agua y se encargan de encender y apagar la bomba automáticamente en función de la apertura o cierre de llaves u otros consumos. Su función principal es mantener una presión constante en la red hidráulica, evitando fluctuaciones y garantizando un suministro de agua estable y uniforme. Pero además de saber para qué sirve un controlador eléctrico de presión de agua, veamos cómo funciona, conozcamos sus ventajas y desventajas, y veamos en qué fijarse al elegir uno.

¿Cómo funcionan?

Controlador electrónico automático de presión

Estos dispositivos funcionan mediante un sensor de presión que detecta las variaciones en la presión del agua. Cuando la presión cae por debajo de un umbral establecido, el controlador envía una señal a la bomba para que se encienda y restablezca la presión. Una vez que la presión alcanza el nivel deseado, el controlador apaga la bomba. Este ciclo se repite automáticamente según la demanda del sistema.

Características principales

Controlador eléctrico de presión

Al momento de seleccionar un controlador eléctrico de presión de agua, debemos observar ciertas características técnicas que determinarán su rendimiento y adaptabilidad a nuestras necesidades específicas. Estas son las más importantes:

  • Rango de presión: indica cuánta presión es capaz de recibir para operar y mantener la constancia. Es fundamental que este rango dse ajuste a los requerimientos del sistema. Por ejemplo, si necesita una presión de agua constante de 3 bar, deberá elegir un controlador que incluya este valor dentro de su rango operativo. Algunos controladores ofrecen la posibilidad de ajustar el rango de presión de forma manual, lo que permite una mayor flexibilidad ante diversos escenarios.
  • Caudal máximo: es la mayor cantidad de agua que puede manejar en un tiempo determinado. Generalmente se expresa en litros por minuto (L/min) o metros cúbicos por hora (m³/h). El controlador debe ser capaz de manejar el caudal máximo del sistema hidráulico donde se va a instalar. De lo contrario, podría haber una disminución en la presión del agua o incluso un funcionamiento deficiente del controlador.
  • Potencia: debe ser compatible con la potencia de la bomba de agua a la que se va a conectar. Si la potencia del controlador es inferior a la de la bomba, podría haber un sobrecalentamiento o un funcionamiento ineficiente del sistema. Por lo general, los fabricantes especifican la potencia máxima de la bomba que puede ser controlada por el dispositivo.
  • Conexiones: deben ser compatibles con las tuberías del sistema hidráulico. Los controladores suelen tener conexiones roscadas o bridadas de diferentes diámetros. Es importante que el diámetro y el tipo de conexión sean los adecuados para facilitar la instalación y evitar fugas.
  • Protección: algunos controladores incluyen características de protección adicionales que pueden ser muy útiles para garantizar la seguridad y la durabilidad del sistema. Por ejemplo, protección contra sobrecarga y protección contra funcionamiento en seco que (impide que la bomba funcione sin agua, para no dañar sus componentes internos).

Ventajas y desventajas

Ventajas
  • Ahorro de energía: al encender y apagar la bomba solo cuando es necesario, se reduce el consumo de energía.
  • Presión constante: garantiza una presión de agua estable y uniforme en toda la red hidráulica.
  • Mayor vida útil de la bomba: al evitar arranques y paradas bruscas.
  • Fácil instalación: la mayoría de los controladores son sencillos de instalar y configurar.
  • Funcionamiento automático: por lo que no requiere supervisión constante.
Desventajas
  • Costo inicial: puede ser mayor que el de un sistema de presión convencional.
  • Mantenimiento: requiere un mantenimiento periódico para asegurar su funcionamiento.
  • Sensibilidad: algunos controladores pueden ser sensibles a las variaciones de voltaje o a las interferencias electromagnéticas.

Implementos de seguridad

Tras descubrir para qué sirve un controlador eléctrico de presión de agua y tomar la decisión de instalar uno, es importante seguir las instrucciones del fabricante y contar con la asesoría de un electricista certificado para realizar la conexión de forma segura. Afortunadamente, no se requieren implementos de seguridad específicos para el proceso.